A Buenafuente le han dado plantón. O una sorpresa, según se mire. Ha sido Isabel Gemio. Su presencia estaba anunciada en todos los periódicos del día para contar qué bien le ha ido en su regreso al programa que abandonó. Pero ella no apareció. ¡Sorpresa! Habrá pensado Buenafuente. ¿Qué se hace en un caso así? Llamar a un invitado que no le importe ser segundo plato o, mejor dicho, plato de repuesto. Y allí que fue Sánchez Dragó para anunciarnos su transformación en un periodista objetivo e imparcial (¿?) como nuevo presentador del trasnochado(r) informativo de Telemadrid (¿?) y para vendernos su nuevo libro, como Umbral pero con mejor educación. Por cierto, ahora que lo pienso, ¿ha vuelto Umbral a la tele para hablar de alguno de sus libros después del percance que tuvo con Mercedes Milá en Antena 3 hace como 15 años? Quizás otro día que la Gemio falte a alguna de sus citas (cual Anita Obregón) alguien podía llamar a Umbral para sustituirla.
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