Nadie dijo que el mundo fuera perfecto y que este blog no fuera patético. Así que ahí va una doble muestra de ambas cosas no aptas para fans incondicionales de El coche fantástico. La primera, el reciente y famoso vídeo de David Hasselhoff por los suelos como una cuba. En el segundo se desvela que Kitt, en realidad, no aprobó el examen de conducir y tenían que recurrir a un curioso truco para simular que conducía solo. Cualquier cosa para que Michael Knight no se pusiera al volante bebido. Dos mitos televisivos por los suelos. Qué fuerte, qué fuerte, qué fuerte, que dirían los de Orlando.
No comments:
Post a Comment